El maquillaje es algo que nos acompaña a la mayoría casi todos los días, y es que nos da ese aspecto de buena cara que tanto nos gusta o cubre esas imperfecciones que no nos gustan tanto. Sin embargo, ¿te has preguntado alguna vez cada cuánto tiempo deberías lavar tus brochas de maquillaje?
Pues hoy te damos la respuesta, y es que debemos lavarlas mínimo una vez a la semana, siempre dependiendo de su uso claro, porque no es lo mismo maquillarse todos los días que una vez al mes. Pero por lo general, si usamos nuestras brochas de manera diaria, deberíamos hacerlo dos veces a la semana.
Esto será muy beneficioso para tu piel, ya que acumulan mucha suciedad y lavarlas es muy rápido y sencillo. Si te interesa lo que te estoy contando, te invito a continuar leyendo 🙂
¿Por Qué Debemos Lavar Nuestras Brochas?
Como decíamos antes, es muy importante limpiar nuestras brochas de maquillaje, aunque nos de pereza o creamos que no hace tanto de la última vez que las lavamos. Incluso hay gente que no tiene ni idea de que es necesario lavarlas.
Estas “herramientas de trabajo” están constantemente en contacto con nuestra piel, con nuestras imperfecciones, con los diferentes productos de maquillaje… Sin embargo, las dejamos expuestas a numerosos microbios, polvo, bacterias… Esto puede provocarnos infecciones cutáneas, acné u otras infecciones en la piel.
Por ello, lavar nuestras brochas nos ayudará por un lado a cuidar y prolongar la vida de nuestras brochas; también hará que nos maquillemos mejor y que la brocha coja realmente el producto que necesitamos sin excesos anteriores; y como no, beneficiará a nuestra piel al estar libre de bacterias.
¿Cómo Debemos Limpiar Nuestras Brochas?
Limpiar nuestras brochas como decíamos antes es muy fácil y rápido. Solo necesitamos agua, jabón y un papel que absorba bien el agua (como el de cocina).
- En primer lugar, mojaremos nuestra brocha, nunca hacia abajo, ya que el agua entrará dentro de esta y tardará más en secarse, además de que puede crear más bacterias en esta. Por ello, lo haremos hacia abajo o de manera horizontal.
- Después, aplicaremos jabón neutro preferiblemente, ya sea en formato gel o pastilla.
- Frotaremos nuestra brocha en movimientos suaves y circulares, ya sea en nuestra mano o con ayuda de un limpiador de brochas (esto es a elección personal).
- Cuando dejen de salir restos de maquillaje, procederemos a aclarar nuestra brocha con agua hasta que esta sea clara sin jabón.
- Por último, quitaremos el exceso de agua con papel a toquecitos y la dejaremos secar durante unas horas de manera horizontal y plana.
Como consejo, no recomendamos guardar las brochas hasta asegurarnos de que están totalmente secas, sobretodo las puntas. Algunos expertos también recomiendan peinar con un peine de púas nuestras brochas para separar los pelitos de nuestras brochas y que hagan mejor su función al maquillarnos.
A la hora de guardar nuestras brochas, debemos asegurarnos de que las metemos en un lugar limpio y fresco.
Esperamos que este post te haya servido de mucho, nos vemos en el siguiente 🙂